7 cosas que te interesa conocer en relación con la productividad de los empleados

7 cosas que te interesa conocer en relación con la productividad de los empleados

En la búsqueda de la optimización de los recursos humanos empleados en la producción de bienes y servicios, las empresas se ven en la obligación de medir la productividad, ya que una empresa que no sea productiva será barrida por la competencia si los competidores pueden producir lo mismo o más empleando menos recursos.

La productividad está relacionada con el rendimiento y la eficiencia, midiendo la relación entre lo que se produce y los medios que se emplean para alcanzar esa producción, tales como mano de obra, materiales o energía. Sin embargo, si nos ceñimos a la productividad de los empleados, estaríamos focalizándonos en factores como el coste salarial o las horas empleadas para conseguir una determinada producción. Por ejemplo, la productividad en una cadena de fabricación se puede medir por el número de unidades producidas por un operario, o grupo de operarios en una unidad de tiempo determinada (hora, día, mes,…).

La medición de la productividad de los empleados es, sin embargo, una tarea de cierta complejidad, que no se puede realizar con una simple fórmula que pueda servir para todo tipo de empresas, ya que cada empresa, atendiendo a su tipología, sector y casuística especial, puede medirla de diferentes maneras.

En relación con la productividad de los empleados, hay 7 cosas que te interesa conocer:

1. Elección de los datos para su cálculo

Hay que medirla en condiciones normales, es decir hay que tener en cuenta periodos de vacaciones, bajas, interrupciones en el suministro de materiales, etc. Si se mide la productividad en un periodo en el que ha habido problemas de suministro en una cadena de producción, estaríamos desvirtuando los datos. Por ello los datos que utilicemos para el cálculo deben estar depurados.

2. Calidad de las horas trabajadas

La productividad laboral de los empleados no es superior por estar más horas en la empresa, ya que lo importante es el uso que se le da al tiempo que se está en el trabajo. No se trata de estar tiempo en la empresa, se trata de aprovechar el tiempo del periodo laboral. Si se obliga a los empleados a estar muchas horas en la oficina, distribuirán su trabajo en una jornada más larga, pero, ¿pueden distribuir su trabajo en un menor tiempo laboral?

«El trabajo se expande hasta llenar el tiempo disponible para que se termine.»
Cyril Northcote Parkinson

Hay trabajadores que prolongan su jornada más allá de las horas estipuladas en su puesto sin que sean realmente productivos, mientras que otros realizan el trabajo en las horas asignadas y generan resultados superiores al gestionar mejor el tiempo de trabajo. En algunos países de Europa el presentismo está mal visto, por los superiores.

En España la productividad es baja en comparación con otros países de la Unión Europea, como Alemania y Francia, a pesar de que somos uno de los países donde más horas se trabaja.

¿Por qué se paga a los empleados? ¿Por estar tiempo en la empresa o por lo que hagan en ese tiempo?

3. Los trabajadores felices son más productivos

En la productividad influyen muchos factores, algunos son difíciles de cuantificar, pero tienen una incidencia decisiva en el rendimiento, como el clima laboral, la relación con los superiores, el reconocimiento profesional, la formación, etc. En una empresa donde existe un buen ambiente laboral, se trabaja en equipo, los empleados se ayudan y colaboran en la consecución de los objetivos de la organización, los trabajadores serán más felices y por ende más productivos. La aplicación del mindfulness en las empresas puede ayudar a mejorar la productividad y reducir el presentismo en la empresa.

4. Producción y productividad no son lo mismo

Producir mucho no significa ser productivos; se puede producir mucho y emplear demasiados recursos para generar esa producción, de manera que la producción generada no se estará obteniendo de manera eficiente.

Además, también es importante destacar la importancia de la calidad, ya que no se debe sacrificar cantidad por calidad. Si por intentar emplear menos tiempo en la fabricación de productos o en la prestación de servicios, sacrificamos la calidad de estos, el resultado puede ser desastroso para la empresa, al incrementarse los gastos en garantías, producirse perdidas de clientes, o tener que emplear tiempo en la revisión de los productos o servicios.

5. Digitalización y robotización

La digitalización y la robotización de las empresas están cambiando nuestra forma de trabajar, incrementando la productividad y la competitividad de las empresas. Si se invierte en tecnología para facilitar el desarrollo de las tareas y la producción no se incrementa, algo se está haciendo mal.

La utilización de nuevas tecnologías, permite conocer mejor a los clientes, incrementar la producción, reducir el tiempo empleado en la producción y en la prestación de servicios y que los productos o servicios sean de mayor calidad.

La automatización de los procesos está cada vez más presente en todos los ámbitos de las organizaciones, facilitando el incremento de la productividad de los trabajadores y liberando tiempo para la realización de otras tareas.

6. Organización del trabajo

Para conseguir incrementar la productividad de los empleados se requiere una correcta organización de cada puesto y de la cadena productiva. En este sentido la filosofía Lean puede ayudar a mejorar la productividad. Con la utilización del Lean se organiza y gestiona el desarrollo de productos, servicios, operaciones, proveedores y las relaciones con los clientes, de manera que se utilice menos esfuerzo humano, menos espacio, menos capital, menos material y menos tiempo, para hacer productos o servicios con menos defectos, menos problemas y de acuerdo con las necesidades de los clientes.

7. Indicadores de productividad

Lo que no se puede medir no se puede controlar y, si no se puede controlar, tampoco se podrá mejorar. Es por ello que para medir la productividad se deben buscar indicadores para su medición, que variarán de unas empresas a otras. Sin embargo, todas las empresas tienen algunos puntos en común, de forma que hay dos magnitudes que en todos los negocios pueden utilizarse para medir la productividad:

  • La producción obtenida.
  • Los recursos que se utilizan para conseguir esta producción.

De manera que podríamos establecer el siguiente indicador:

Productividad de los empleados = Productos o servicios producidos / Recursos empleados

Algunos ejemplos de indicadores de productividad serían:

  • Empleado cadena de producción. Unidades producidas por hora.
  • Vendedor. Ventas generadas al mes.
  • Empleado call center. Llamadas emitidas o recibidas por hora.

A nivel de la cuenta de pérdidas y ganancias de una empresa, se puede determinar la productividad de los trabajadores mediante la siguiente ecuación:

Productividad de los trabajadores = Resultado de explotación / Gastos de personal

Cuanto mayor sea este ratio, mayor rendimiento se estará obteniendo de los trabajadores.

La formación también es un elemento clave para el incremento de la productividad de los trabajadores. El CEF.- ayuda a las empresas a mejorar la productividad de sus empleados mediante una amplia gama de programas formativos. En el Máster en Dirección y Gestión de Recursos Humanos, del CEF.- se ayuda a los directivos a mejorar y medir la productividad de los trabajadores.

Master en Dirección y Gestión de Recursos Humanos

José Ramón Fernández de la Cigoña Fraga
Director Administrativo y Financiero