El  Pleno del Tribunal Constitucional ha estimado el recurso presentado por el  Gobierno contra la Ley de Castilla-La Mancha 7/2015, de 2 de diciembre, que  fija en 35 horas semanales la jornada laboral de los funcionarios al servicio  de la Administración autonómica. El Tribunal declara inconstitucional la norma  recurrida porque resulta “incompatible” con la Ley 2/2012, de 29 de  junio, de Presupuestos Generales del Estado para el año 2012, con la que, en el  ejercicio de su competencia exclusiva en materia de legislación laboral (art.  149.1.7 CE) y de regulación básica de los derechos y deberes del personal del sector  público (art. 149.1.18 CE), el Estado ha establecido que la duración de la  jornada mínima de trabajo de los funcionarios debe ser de 37 horas y media  semanales de trabajo efectivo de promedio en cómputo anual. La resolución, de  la que ha sido ponente el Magistrado Juan José González Rivas, cuenta con el  voto particular del Magistrado Fernando Valdés Dal-Ré, al que se han adherido  la Vicepresidenta del Tribunal, Adela Asua, y el Magistrado Juan Antonio Xiol.